1 Finca experimental de la SS / “Jardín de herbolaria” / “Plantación”
Fuera del campo de prisioneros había una gran extensión de tierras de regadío. En 1938, los prisioneros preparan el terreno que, a partir de entonces, habrán de cultivar en trabajos forzados. El nombre eufemístico que la SS dio a esta empresa agrícola fue el de “jardín de herbolaria”. Hoy en día, casi todo este sector está ocupado por naves industriales.
El complejo estaba formado por varias edificaciones, entre ellas, una intendencia, un centro de investigación y docencia, una especiería, un depósito de herramientas, colmenas, invernaderos y, desde luego, grandes extensiones de tierras de labranza. Heinrich Himmler tenía la idea de que la investigación y el cultivo de plantas medicinales y especias permitirían al Estado nacionalsocialista dejar de importar medicinas y condimentos del extranjero. El máximo líder de la SS promovía la creación de una “Medicina popular” naturista, un proyecto de gran prestigio en la política sanitaria del nacionalsocialismo. La finca de experimentación fue gestionada por el “Centro Alemán de Investigación en Nutrición y Dietética” (DVA), una sociedad de responsabilidad limitada fundada por la SS en 1939. En la especiería, los habitantes de Dachau y los municipios aledaños podían adquirir los productos del “jardín de herbolaria”. En secreto, algunos prisioneros entraron en contacto con la población civil y, con su ayuda y jugándose la vida, lograron enviar y recibir mensajes.
Los reclusos llamaban “plantación” al temible comando de labranza en el “jardín de herbolaria”. En jornadas verdaderamente extenuantes, los miembros del comando trabajaban absolutamente expuestos a las inclemencias del tiempo. La falta de ropa adecuada, la desnutrición, el maltrato y las vejaciones por parte de la SS hacían de esta dura faena todo un martirio que podía costarles la vida. Menos brutales eran las condiciones de trabajo que imperaban en los invernaderos y en el resto de las edificaciones. Había incluso un comando de dibujantes encargado de elaborar un herbario.
En la actualidad, se conservan la sede de la administración, el instituto y vestigios de tres invernaderos. Hay planes para rehabilitar el complejo histórico, propiedad de la Ciudad de Dachau, y para integrarlo al memorial destinándole un uso nuevo.